Por Jerzy Flisak
30 jun 2010
29 jun 2010
El velatorio
La lección de anatomía del Dr. Nicolaes Tulp, Rembrandt, 1632
Dzerzhinsky y Voroshilov ante el féretro de Lenin, Moscú, 1924
Eugene Smith, The wake, España, 1950
Joachim Ladefoged, Mourning women, Krékés (Albania) 1997
Roger Lemoyne, Kosovo, 1998
27 jun 2010
25 jun 2010
Fotomatón (Warhol/Acconci)
Photobooth self-portrait, Andy Warhol, 1963
Photomatic enunciation piece, "Anything goes", Vito Acconci, 1969
23 jun 2010
21 jun 2010
Flaubert (palabras gastadas)
Tantas veces había oído que le decían esas cosas que para él nada tenían de original. Emma se parecía a todas las amantes; y el encanto de la novedad, cayendo poco a poco como un vestido, dejababa al desnudo la eterna monotonía de la pasión, que siempre tiene las mismas formas y el mismo lenguaje. Este hombre tan lleno de práctica no distinguía la diferencia de sentimientos bajo la semejanza de expresiones. Porque labios libertinos o venales le habían susurrado frases parecidas, creía muy poco en el candor de éstas; había que rebajar -pensaba él- las palabras exageradas, esconden afectos mediocres; como si la plenitud del alma no se desbordara a veces en las metáforas más vacías puesto que nadie, jamás, puede dar la exacta medida de sus necesidades, de sus ideas, de sus dolores, pues la palabra humana es como un caldero cascado sobre el que tocamos melodías que sólo harían bailar a los osos, cuando lo que pretendemos es conmover a las estrellas.
Madame Bovary, Alba, 1984, Trad. Luisa Salomone.
18 jun 2010
Michel Malet (la ominipresencia de la imagen)
Desde que la imagen se encontró con el sonido, se han quedado como paralizados el tacto, el gusto y el olfato, que son sin embargo los primeros lugares de saber de la nutrición. La vista y el oído, los dos vectores más utilizados en la comunicación humana, han ganado por la mano a los otros. Son los más inmateriales, los únicos que sabemos grabar y transmitir a distancia. Ahí está su ventaja: fundamentan relaciones humanas mundiales y van incluso más allá de nuestro planeta.
Michel Malet, Breve historia de la imagen, Siruela, 2010.
16 jun 2010
Van Gogh (botas/zuecos)
Nature morte avec chou, sabots et pomme de terre, 1881
Nature morte, bouteilles, pots, sabots, noviembre/diciembre 1884
Nature morte avec casserole en terre, bouteille et sabots, 1885
Les souliers noirs, otoño 1886
Vieux souliers aux lacets, otoño 1886
Trois paires de souliers, fin de otoño 1886
Les souliers, mayo/junio 1887
Paire de souliers sur sol bleu, invierno 1887
Paire de sabots en cuir, principios de marzo 1888
Nature morte, souliers, 1888
La sieste, 1890
13 jun 2010
Magritte (botas/Le modèle rouge)
Le modèle rouge, 1935, CNAC Pompidou
The problem of the shoes demonstrates how far the most barbaric things can, through force of habit, come to be considered quite respectable. Thanks to "Modèle rouge," people can feel that the union of a human foot with a leather shoe is, in fact, a monstrous custom. R. Magritte, 1938.
The red model II, 1937, Moderna Museet
Le modèle rouge III, 1937, Museum Boijmans Van Beuningen
Le modèle rouge, 1952, Christie's
11 jun 2010
8 jun 2010
Walker Evans (The Burroughs, cotton sharecroppers, Hale County, Alabama )
A veces olvidamos que detrás de una imagen, más si se convierte en icónica, siempre hay o hubo vida, historia.
Floyd Burroughs, cotton sharecropper, 1936.
Floyd Burroughs and his daughter, 1936.
Charles and his father Floyd Burroughs, 1936.
Allie Mae Burroughs, 1936.
Allie Mae Burroughs, wife of cotton sharecropper, 1936.
Lucille Burroughs, daughter of a cotton sharecropper, 1936.
Lucille Burroughs picking cotton, 1936.
Squeakie asleep (Othel Lee Burroughs), 1936.
Front porch of the Burroughs' home, 1936.
Part of the bedroom of Floyd Burroughs' cabin, 1936.
Table, Fireplace, and Pictures on Wall of Floyd Burroughs's Bedroom, 1936.
Kitchen in house of Floyd Burroughs, sharecropper, near Moundville, 1936.
Washstand in the dog run of Floyd Burroughs' cabin, 1936.
7 jun 2010
Le Corbusier (La mano abierta)
Chandigarh, India, 1950-1965
"Este fue el único gesto político de mi vida: la mano abierta. Es anticomunista, me dijeron. En absoluto, es mano abierta para recibir y dar, es signo de optimismo ante el mundo moderno, catastrófico. Doy la palabra a los otros para solucionar este momento trágico".
Bocetos
Boceto
4 jun 2010
Albert Camus (el asesinato)
Lo importante por ahora no es, pues, remontarnos a la raíz de las cosas, sino, siendo el mundo lo que es, saber cómo conducirnos en él. En la época de la negación podía ser útil interrogarse sobre el problema del suicidio. En la época de las ideologías, hay que ponerse en regla con el asesinato. Si el asesinato tiene sus razones, nuestra época y nosotros mismos somos consecuentes. Si no las tiene, vivimos en la locura, y no hay más salida que la de encontrar una consecuencia o apartarse. (...) Hace treinta años, antes de decidirse a matar se había negado mucho, hasta el punto de negarse mediante el suicidio. Dios hace trampa, todo el mundo con él y yo mismo, por lo tanto, muero: el suicidio era la cuestión. Hoy día la ideología sólo niega a los otros, los únicos tramposos. Entonces, se mata. Cada día, al alba, asesinos con galones entran en una celda: el asesinato es la cuestión. (...)
Si no se cree en nada, si nada tiene sentido y no podemos afirmar valor alguno, todo es posible y nada tiene importancia. Sin pros ni contras, el asesino no tiene ni deja de tener razón. Se pueden atizar los crematorios como puede uno dedicarse al cuidado de los leprosos. Maldad y virtud son azar o capricho.
Se decidirá entonces no obrar, lo que equivale por lo menos a aceptar el asesinato de los demás sin perjuicio de deplorar armoniosamente la imperfección de los hombres. Se imaginará también reemplazar la acción por el diletantismo trágico; en ese caso, la vida humana se convierte en una apuesta. Uno puede proponerse, en fin, emprender una acción que no sea gratuita. En este último caso, a falta de un valor superior que oriente la acción, uno se dirigirá en el sentido de la eficacia inmediata. No siendo nada verdadero ni falso, bueno ni malo, la regla consistirá en mostrarse el más eficaz, es decir, el más fuerte. Entonces el mundo no se dividirá ya en justos e injustos, sino en amos y esclavos. Así, hacia cualquier lado que uno se vuelva, en el centro de la negación y del nihilismo, el asesinato tiene su lugar privilegiado.
Albert Camus, El hombre rebelde, 1951.